LA RESPIRACIÓN EN EL MÚSICO

Por | 2020-03-20T12:56:47+01:00 marzo 19th, 2020|Categorías: Noticias|Etiquetas: , , |1 comentario

 ¿Alguna vez os habéis parado a pensar en los beneficios que la respiración os puede aportar a vuestra práctica con el instrumento?
Parece como si sólo fuera importante en los instrumentistas de viento, pero no es así.  Un buen control de la respiración tendrá resultados muy
positivos en todos los músicos.
La respiración es un gesto automático, el cual no requiere ningún aprendizaje. Sin embargo, podemos actuar de manera consciente y voluntaria en ella y será ahí donde el músico puede obtener sus beneficios.
En esta lectura encontrarás generalidades y algún ejemplo más particular de cómo la respiración puede aumentar el rendimiento de un músico. Por supuesto, no puede extrapolarse a cada una de las particularidades de cada músico. Para sacarle el máximo beneficio, un fisioterapeuta especialista en músicos podrá pautarte y guiarte en los ejercicios que podrás hacer, adaptándolos a tus necesidades.
A continuación, se detallarán algunos de los beneficios que puedes obtener acompañado de un ejercicio para que puedas ponerlo en
práctica:

Disminuirá las lesiones del tejido musculoesquelético: mantener una respiración fluida durante la práctica con el instrumento hará que tus
células estén mejor oxigenadas, evitando, por tanto, que el tejido sufra. A menudo, nos encontramos con músicos que mantienen periodos de
apnea (excluimos los músicos de viento) mientras tocan, disminuyendo, por tanto, el aporte correcto de oxígeno.

EJERCICIO 1: Elige una partitura fácil que no requiera mucha concentración y lleva tu atención a la respiración intentando hacer respiraciones profundas mientras tocas. No pasa nada si el sonido no es el adecuado, lo importante es mantener un buen ritmo respiratorio.
Para los instrumentistas de viento, solo ejecutar el movimiento de manos o tocar las llaves, sin emitir sonido realizando respiraciones profundas.

Ayudará a mantener una buena postura:en la respiración intervienen diferentes partes de nuestro cuerpo, por tanto, tener unmovimiento óptimo respiratorio ayudará a evitar disfunciones en dichas zonas. Te pongo un ejemplo para aclarar este punto: un acortamiento en el pectoral mayor derecho hará que el hombro de ese mismo lado se anteriorice produciendo rigidez y cierre de la caja torácica. Si hacemos ejercicios respiratorios a ese nivel (a través de una respiración costal superior) ayudaremos a conseguir más libertad de movimiento en las zonas afectadas.

EJERCICIO 2: Colócate tumbado boca arriba con las piernas flexionadas. Posiciona tu mano derecha detrás de la nuca o el brazo derecho apoyado en el suelo dibujando un ángulo de 90º con respecto al tronco y la izquierda entre tu axila y el pecho (abordando las costillas altas). Durante la inspiración, lleva tu atención a la zona de la caja torácica alta e intenta expandirla al máximo en ambos lados de las costillas altas y al espirar con tu mano izquierda presiona dicha zona en dirección hacia el ombligo. Puedes hacer una serie de 10 repeticiones realizando una pausa entre respiración y respiración.

● Ayudará a disminuir el estrés. El músico a lo largo de su carrera se enfrenta a diferentes situaciones que le pueden ocasionar estrés:
audiciones, oposiciones, conciertos… A menudo, este estrés va asociado con una respiración superficial, es decir, con déficit de volumen respiratorio y aumento de la frecuencia respiratoria. El tener un buen control y manejo de la respiración nos ayudará a modificar dichos parámetros a través de diferentes herramientas y, por tanto, a encontrar una mayor sensación de bienestar.

EJERCICIO 3: Colócate tumbado boca arriba con las piernas flexionadas y posiciona una mano en el abdomen y otra en el esternón.

Lleva tu atención a las zonas donde están tus manos e intenta expandirlas durante la inspiración y no hagas nada durante la espiración, simplemente echa el aire por la boca como si hicieras vaho.
Intenta coger cada vez más aire de manera progresiva. Haz las repeticiones que te sean necesarias hasta sentir que tu respiración se vuelve más lenta y profunda (en caso de no percibir dicha sensación, no pasa nada, vuélvelo a intentar en otro momento, con la práctica irás despertando tus sensaciones).
Ayudará a controlar el miedo escénico o TRAC: este apartado está relacionado con el anterior. Hay diferentes factores que hacen que el
músico pueda o no sufrir en algún momento miedo escénico. Puede ir ligado a un momento de estrés, por tanto, disminuir dicho estado, nos
ayudará a gestionar mejor el miedo escénico. Como citaba en el apartado anterior, podrá ser beneficioso hacer ejercicios trabajando una
respiración más lenta y profunda (aumentar el volumen respiratorio).

EJERCICIO 4: Hacer ejercicios respiratorios antes de un concierto o una audición. Para ello, deben ser ejercicios con respiraciones lentas y
profundas (cualquiera de los citados anteriormente). Es importante que sean ejercicios que ya has practicado antes; si son ejercicios nuevos
puede causar estrés aumentando así el TRAC.

Para llevar a cabo todas estas pautas, es importante conocer las diferentes partes de nuestro cuerpo que intervienen en la respiración y
cómo se produce dicho mecanismo. Estos conocimientos nos ayudarán a tener más conciencia sobre nuestro cuerpo y a obtener mejores resultados.
Por ello, os recomendamos seguir muy atentos a nuestro blog ya que próximamente os hablaremos sobre la anatomía y fisiología de la respiración.

LAURA NAVARRO LANCHAS

Nº Colegiado 8169

About the autor:

Un comentario

  1. […] entrada está relacionada con el artículo anterior: la respiración en el músico, donde dijimos que conocer las diferentes estructuras que actúan en el movimiento respiratorio nos […]

Deje su comentario